Si observamos detenidamente la evolución del sector bananero de los últimos 10 años, podemos analizar cuáles son los puntos fuertes del negocio y donde hemos hecho agua, es decir, por dónde se nos está yendo el negocio como el agua entre los dedos.

De Ecuador, si algo es característico es su pujante comercio exterior, lo que nos ha permitido ampliar nuestra oferta de banano a más países. Hasta la década del 2000, solo teníamos el mercado de la UE., y el mercado de los EE.UU., como nuestros socios estratégicos en el negocio bananero. Ahora tenemos muchos más mercados, aproximadamente 62 países en todos los continentes. Se destacan Rusia, Medio Oriente, África, Europa del Este, Asia Central y Oriental, entre otros. Sin embargo, estos mercados tienen una diferenciación con los tradicionales mercados de la UE., y los EE.UU., que no son mercados de contrato, sino de spot.

Alrededor de estos mercados también se crearon muchas expectativas, especialmente al crecimiento sostenido de las exportaciones al mercado ruso, que hoy participa con más del 22% de las exportaciones totales y es un mercado que hubiera crecido mucho más si las condiciones de los últimos tres años no le hubieran sido adversas.

Recordemos que los problemas de este mercado empezaron desde que Rusia, decidió anexarse la isla de Crimea y recientemente en febrero de este año realizar la invasión a Ucrania, situaciones que han saboteado las condiciones de crecimiento del banano a este mercado.

Igual situación ha pasado con los otros mercados emergentes que han ido apareciendo en la década anterior. Algunos muestran como el caso de Europa del Este, con Albania a la cabeza, que se sostienen en el tiempo con la demanda. Medio Oriente, es un mercado potencial, lamentablemente debido a la inestabilidad política de la región y las sanciones impuestas por los EE.UU., a Irán su curva de demanda de banano ha caído en los últimos años. La región como tal ha mejorado su perspectiva de compras en el bienio 2021 – 2022 con un incremento del 22.79% en el período enero – junio.

Donde tenemos un serio revés es en los mercados de EE.UU., de Norteamérica, UE., norte y UE., Mediterráneo, con caídas en el período enero – junio 2021 – 2022 de -20,03 -14,66 y -15,40% respectivamente. Esta diferenciación muy marcada de un año a otro si son una preocupación para los exportadores y productores, pues estos mercados han sido el baluarte de años anteriores para el liderazgo de las exportaciones bananeras del país. También evidencia una pérdida de competitividad por factores exógenos y endógenos que se han agravado con la crisis del Covid 19, del 2020, y que persisten hasta la actualidad con la política de cero riesgos de contagios en China, uno de los mercados marcadores de la demanda frutícola.

El gobierno, los gremios de productores, los gremios de exportadores tienen una dura tarea si queremos mantener el liderazgo que siempre nos ha caracterizado. Sin embargo, este liderazgo no debe estar basado en la quiebra de los pequeños y medianos productores a quienes el PMS de los últimos años no se les ha respetado, creando un escenario catastrófico para su entorno familiar y social. Aproximadamente se habla de 20 mil hectáreas abandonadas en la actual crisis del banano del 2022.

En las próximas semanas se reunirán los nuevos miembros del Consejo Consultivo a la espera de poder consensuar un nuevo precio para la caja de banano 2023. El Ing. Bernardo Manzano Díaz, actual ministro del MAG, ha mostrado sensibilidad para el lado más débil de la cadena y espera corregir las distorsiones de un proceso de comercialización inclinado para un solo lado, donde el poder de negociación es evidente en detrimento de la otra parte.