La crisis del sector banano tiene varias lecturas que ahora mismo se la deben estar haciendo los productores, los exportadores, importadores y me atrevo a decir todos los actores de la cadena indistintamente que tan bien o mal librados están saliendo de ella.

Esta crisis es para una lectura especial para las autoridades del MAG empezando por el señor ministro Ing. Pedro Álava, que no atina a saber cuál mismo es el precio oficial de la caja. Claro esta que con tanto barullo respecto al precio spot que en las últimas semanas ha descendido a niveles insospechados de hasta cincuenta centavos de dólar la caja, siendo el hazmereir para los mercados y el llanto inconsolable para miles de productores y amas de casas, que en esta semana están viendo mermadas sus mesadas para la alimentación, el ministro prefiere escaparse por la vía del lapsus in memoriam.

El presidente Sr. Guillermo Lasso, quien tiene una lectura diferente de la crisis del banano, de la que tienen los afectados y representantes del sector, que le han pedido apersonarse para resolverla como si lo están haciendo otros gobernantes, esperará la llegada de los viajantes a Bruselas y Berlín, que la semana anterior cumplieron una apretada agenda en esas dos ciudades europeas.

El presidente requiere de un informe pormenorizado sobre si se lograron los objetivos de concientización al mas alto nivel de la situación de los bananeros nacionales. Pero los viajantes no traen soluciones solo expectativas de mejorar las condiciones de comercialización del banano en el mercado europeo.

Lo mas importante en toda esta crisis de mas de seis semanas son las lecciones que deja la misma. Repetidamente se dice que toda crisis es una oportunidad. Con ese concepto van a discrepar todos los pequeños productores que están recibiendo un precio por debajo del PMS., y están a punto de quebrar o dejar perder sus bananeras-

La única lección que han aprendido es que primero no hay gobierno y por ende no hay ministerio de agricultura.

Una segunda lección es que están solos y, que deben buscar la solución no en las decisiones gubernamentales muchas de estas amañadas con los grupos de poder económico dominantes en el país.

Una tercera lección es que necesitan estar mas unidos y cohesionados para enfrentar no solo la crisis de la sobre oferta que ha creado el conflicto bélico Rusia – Ucrania, que son de unas pocas cajas cada semana que no representan el 3% del negocio bananero, porque no es que no se esté vendiendo sino que se está vendiendo menos y que por tanto no debería gravitar y ser el eje de la crisis que hunda el precio de la caja de banano en el país.

La crisis también debería servir para mirar casa adentro el tema de la sobre siembra nacional que crea esta si, una producción flotante de nuevas cajas que gravita permanentemente en el precio de la caja de banano.

Ecuador se ha caracterizado no de ahora sino de siempre en boicotear los precios en el mercado internacional al inundar los mercados con cajas llenas de banano barato. Muchas veces incluso nos han acusado de dumping, que quiere decir que ponemos en los mercados banano por debajo del precio de producción.

Esta práctica la auspician los exportadores de banano que pescan a río revuelto en lo que se vuelve una carnicería de sálvese quien pueda. Todo con el fin de ganar espacios en los mercados llamados emergentes. Al final todo termina revirtiendo y sentado precedentes negativos de prácticas comerciales reñidas con la moral, la ética y las buenas prácticas del comercio internacional.