IMPULSO DE HERRAMIENTAS TECNOLÓGICAS DEBE VENIR DE TODOS LADOS
Ya lo dijo Albert
Einstein como una sentencia. “Hacer lo mismo y esperar un resultado diferente
es una locura”. Lo ratifica el CEO de Be Smart, Johnny Valencia López, quien
tiene una experiencia de más de 15 años en el desarrollo de soluciones
digitales en el sector agrícola, especialmente el bananero.
Ecuador es un país diferente después del
Covid, es como si fuera otro país afirma nuestro interlocutor Johnny Valencia.
“Luego del COVID existe otra realidad. La gente comenzó a ver que necesitaba
poder hacer tele trabajo, poder comunicarse a distancia, poder hacer tareas no
presenciales. Esto marca y define una necesidad en todos los sectores y ,el
sector agrícola no es la excepción, ¿cierto? Entonces es aquí donde el
productor cambia también ya su mentalidad y dice no, yo necesito poder trabajar
sin estar presente. Es desde esta época que la adopción de tecnología está
resultando un poquito más fácil. Aún hay que trabajar, pero está un poco más
fácil entrar a estos agricultores que de pronto antes lo hacían de manera
convencional a través del medio clásico. Reconocían la información, era bueno
en su momento hacerlo de esa manera, pero que ahora inclusive muchos por el
tema de la seguridad tienen que estar alejados de sus haciendas y deben poder
verificar que se realicen todos los procesos. Analizar costos y revisar toda la
información, pero ahora de manera virtual estando ellos en Guayaquil y ese
proceso tienen que hacerlo con sus haciendas o fincas que están en otras
provincias”.
Asegura Valencia, que todo esto parte de la
conectividad que es muy importante porque brinda la trazabilidad del producto.
Incluso ayuda a controlar las contaminaciones que pudieran darse en la carga.
También es una herramienta de ayuda para mejorar los costos. Con la herramienta
adecuada, asegura, el usuario va a poder capturar los datos necesarios y
analizarlos en el tiempo real. Por ello considera que es importantísimo el tema
de la conectividad mediante el internet y el desarrollo de la tecnología inclusiva
de los softwares.
Considera el Ceo de
Be Smart Johnny Valencia, que el sector camaronero es que el mayormente ha
desarrollado soluciones web. Este sector ha entendido el tema de la innovación
tecnológica como una ventaja competitiva en el mercado. Esto lo tienen
totalmente claro y los números no los dejan mentir. Sin embargo, los
agricultores de otros cultivos como el banano, cacao, arroz han sido más
reacios en invertir en tecnología.
Valencia considera
que entre estos productores hay que cambiar el chip, hay que hackear todas esas
formas de trabajar. Esto ocurre dice, porque muchas veces el productor bananero
o cacaotero tiene 20, 30 años haciendo lo mismo y se pregunta ¿Por qué cambiarlo?
¿Por qué cambiar una estrategia que me permitió llegar hasta este momento? Allí
sostiene, hay un tema cultural que hay que trabajarlo bastante fuerte.
¿QUIÉNES DEBEN EMPUJAR LA CARRETA DE LA TECNOLOGÍA?
En este punto
sostiene el CEO de Be Smart, Johnny Valencia, el impulso debe venir de todos
lados, del gobierno, del sector privado, los agricultores, los gremios, porque
estamos atrasados y nos estamos quedando del tren del desarrollo tecnológico.
En este contexto dice que tanto la parte privada como la parte pública debe
trabajar en impulsar estos cambios, debe haber incentivos para que el
agricultor invierta en tecnología.
Valencia considera que el sector bananero es uno de los que sigue los pasos del
sector camaronero pero hay mucho que hacer a pesar de que en muchas haciendas
el uso o la adopción de internet ya esta. La deficiencia todavía se ve mucho en
campo que al no existir una antena de algún operador, no permite la
conectividad inclusive del mismo campo con la parte administrativa de la
hacienda. Asegura que allí es donde los esquemas offline entran a jugar un
papel importantísimo para que la captura de datos fuera de línea pueda realizarse
y luego, pues sencillamente, en oficina matriz conectarse y sincronizar los
datos.
Valencia manifiesta que al momento existe muchas
tics en línea como soluciones y a la vez como exigencias planteadas por
Agrocalidad, Aduanas y otros organismo que el productor bananero, cacaotero
debe cumplirlas. Ya no es un tema de querer o no querer. Es un tema coyuntural
que obliga al productor alinearse hacía la tecnología. Debe ir desarrollando o
adquiriendo tecnología que le permita la conectividad con los otros sistemas ya
existentes a través de diferentes métodos que los hay como por ejemplo las
apps.
El drama de los cacaoteros y agricultores de otros productos como la soja es un
claro ejemplo de la importancia de la captura de datos, porque para poder
demostrar que efectivamente no se realizó deforestación debes comprobar y si no
tienes los datos eso va hacer imposible. Algunos productores solo están
acostumbrados a capturar solo lo necesario y allí nuevamente es donde el
productor debe cambiar de paradigma y hacer un cambio de chip, por la cual la
captura de la información sea de todo el proceso, que cubra la mayor parte y no
solo lo necesario, estos datos le permitirán realizar la trazabilidad.
Valencia enfatiza que todo gira en torno a bajar los costos y ser competitivos.
Pero no lo podrá hacer queriendo hacer lo mismo que ha venido haciendo
probablemente los últimos 30, 40 o 50 años. Realmente no lo va a conseguir, no
lo va a lograr. Y es cuando aparece la tecnología para resolver la disyuntiva
¿Cómo hago para bajar mis costos? El productor sabe que tiene retos inmediatos
de asegurar un salario digno, una rentabilidad a la explotación de sus tierras
y obtener un producto de calidad, que son al final los tres puntos importantes
de cualquier explotación agropecuaria. Todo se resume en opinión de Johnny Valencia en cuidar el personal, tener un producto de calidad y obviamente tener
una rentabilidad del negocio.
Eso es lo clave. Entonces llegamos donde el productor debe entender que es la
tecnología la que va a permitir hacer esto, es la medición, tener métricas que
te permitan analizar dónde está un consumo mayor o menor y cuánto estás
produciendo con ese consumo, cuánto estás consumiendo de agua, cuánto estás
consumiendo de fertilizante, qué resultado te estás dando la tierra, cuánto
producto estás extrayendo de ese lote, sector o hacienda. Entonces,
definitivamente hacer esa tarea titánica a mano es imposible. O es posible, pero con una inversión de más personal, entonces está incurriendo en más gastos en
lugar de menos gastos.
A manera de conclusión el CEO de Be Smart, Johnny Valencia ratifica que la
tecnología definitivamente es el mejor aliado que tiene el productor porque
está allí para tomar todas esas decisiones impensadas minimizando la cantidad
de errores que de pronto un proceso manual arroja por la demora de obtener los
datos a la mano que podrían ser 4, 5 semanas cuando la tecnología digital te la
puede dar en horas si es que no es antes. Todo esto juega a favor de la
tecnología que no solo esta para abaratar costos y ser más eficientes sino que
asegura una línea de trazabilidad transversal desde la producción hasta el
consumidor final.